La Comisión de Vigilancia Profesional del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de Mendoza mantuvo recientemente un encuentro virtual con la Comisión de Defensa y Vigilancia de la Profesión del Colegio de Graduados en Ciencias Económicas de Tucumán. El eje de la reunión giró en torno a una problemática tan vigente como sensible: la falta de matriculación de Contadores Públicos y Licenciados en Economía que se desempeñan en el ámbito público en Mendoza.

El intercambio, cálido y productivo, nos permitió conocer de primera mano la experiencia tucumana, que ha logrado, con perseverancia y creatividad, importantes avances en la incorporación de funcionarios públicos al padrón de matriculados de su Colegio. Lejos de tratarse de una simple cuestión administrativa, se discutió la importancia institucional, ética y legal de este paso fundamental para el ejercicio profesional dentro del Estado.

Uno de los puntos destacados fue la estrategia de campaña que desarrollaron: visitas directas a reparticiones públicas, universidades y hospitales; reuniones con autoridades jerárquicas; difusión de los marcos normativos vigentes —incluyendo la Ley Nacional N.º 20.488 y las leyes provinciales correspondientes—, y la implementación de un programa sistemático de información y concientización. Año tras año, insisten en este contacto directo, porque, como bien sabemos, las personas cambian pero los desafíos persisten.

La metodología fue clara: identificar a los profesionales en funciones, especialmente a aquellos que perciben el adicional por título, e invitarlos personalmente a formalizar su situación ante el Colegio. Esta invitación no fue meramente persuasiva, sino acompañada de información concreta, beneficios institucionales como el acceso a capacitaciones y recursos, y —algo no menor— el respaldo que el Consejo ofrece ante conflictos derivados del ejercicio profesional.

Asimismo, se destacó el trabajo de base con estudiantes avanzados, a través de charlas en universidades y el uso responsable de bases de datos, como una inversión a largo plazo en la cultura de la matriculación.

En el plano institucional, se compartió información sobre el funcionamiento de los veedores y el proceso de designación de los secretarios técnicos, así como sus incumbencias y responsabilidades. Estos espacios de control y acompañamiento constituyen una garantía más del compromiso con la calidad profesional.

Como cierre, no podemos dejar de expresar nuestra preocupación por la persistente —y errónea— creencia de que quienes trabajan en relación de dependencia o no "legalizan" documentos están exentos de la obligación de matricularse. Este supuesto, ampliamente difundido en ciertos ámbitos, desconoce las disposiciones de la Ley 5051 de Mendoza y la Ley Nacional 20.488, que claramente establecen la obligatoriedad de estar matriculado para ejercer actos propios de las profesiones de Ciencias Económicas, incluso dentro del Estado.

Este encuentro fue, sin dudas, una instancia enriquecedora y fructífera. Nos deja herramientas prácticas, perspectivas compartidas y, sobre todo, la certeza de que el camino es colectivo. Seguiremos trabajando, en diálogo con otras provincias, para construir una profesión fuerte, respetada y comprometida. Porque proteger a los matriculados es también proteger a la sociedad.